6 de agosto de 2010

Dando vueltas y m-ás-vueltas

No me pidas que te explique, porqué, me es tan difícil entregarte el corazón. Es que si no nos arriesgamos... sino nos arriesgamos, nunca sabremos que se siente pertenecerle al otro. Ni vos, ni yo. Estamos inmóviles, nuestra cabeza estalla de preguntas, de miedos, de fracasos. ¿Y sabés que? Es tiempo. Es tiempo de que el amor llegué hacia vos; que si un fracaso viene consigo ¿Qué más da?. El amor se elige, se va armando de a-po-qui-to, se "investiga". Y sino te arriesgas, ¿Cómo vas a sentir o creer en el amor? Dicen que cuando se encuentra el amor, es para toda la vida. Vé y busca, escarba... no te desanimes. Para fracasar estamos varios y fracasamos por desconfiar, por tener miedo.
Cuando era piba me idealizaba a mi novio. Ahora que soy grande mi cabeza no idealiza, mi cabeza se asusta y se me achicharra el corazón. El sentir es más lindo que ver la lluvia caer por tu ventanal, caída libre. Hay que dejar de preocuparte por lo que pasará.

¡Vamos, quiero que sientas ése vértigo conmigo!
El tiempo es hoy y las agujas del reloj no paran de contar minutos.

No hay comentarios: